BRONX, New York. – Jeimer Candelario sale al terreno de juego a competir, a jugar duro, pero sobre todo pensando en ganar jugando al máximo cada partido que tiene en las Grandes Ligas.
“Lo que buscamos es competir, salir al terreno de juego a dar el cien por ciento, siempre pensando en ganar”
En su novena temporada en MLB y primera con Cincinnati batea de 284-68 (.239), 30 anotadas, 17 dobles, dos triples, catorce jonrones, 40 remolcadas y tres bases robadas en 75 juegos.
“Siempre me preparo física y mentalmente, ya que son unos 162 largos juegos de la temporada regular, por lo que se requiere mucho sacrificio, mucho tiempo, mucha capacidad”
Candelario comenzó en primera base y se fue de 3-0 con una base por bolas en la victoria del miércoles por 3-2 sobre los Yankees en el juego del miércoles, tercero y último de la serie.
Esta fue la primera apertura de Candelario en el campo desde que regresó de una lesión en el tendón de la corva durante el fin de semana. Se desempeñó como bateador designado de Cincinnati en los dos juegos anteriores.
Como resultado de jugar en la primera base, Spencer Steer se mudó al jardín izquierdo por ese día.
Candelario, nacido en New York, uno 31 jugadores dominicanos nacidos fuera de la República Dominicana juego en Detroit (6), Cubs (3), Washington y Cincinnati.
“Siempre agradecido de venir al Bronx, aquí tengo a mi familia, así que por lo menos par de veces al año cuando jugamos con Mets y Yankees, pueden verme”
Como agente libre después de su temporada de recuperación en 2023, firmó un contrato de tres años en diciembre con los Rojos de Cincinnati.
Fue por 45 millones de dólares, con una opción para un cuarto año por 15 millones de dólares. Se esperaba que reemplazara a la leyenda del equipo titular Joey Votto en la primera base.